Buenos deseos para navidad

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Ya estamos en uno de los días más mágicos para los adultos, para los niños es el día en el que vienen Papa Noel y los Reyes Magos y para los mayores el día de la lotería sin duda es el más especial. Todos tenemos deseos y desde luego queremos que se cumplan, deseos que aunque en principio siempre tienen que ver con la salud y el trabajo al final el dinero también resulta necesario, sobre todo cuando la situación es difícil. Hoy soñamos con que nuestro décimo sea el premiado, pensamos en todo lo que vamos a pagar y en las cosas que vamos a disfrutar y en comprarnos una casa un coche y todo lo que se nos ponga por delante, haremos un viaje y disfrutaremos como hace tiempo que no hacemos, la verdad que soñar es muy bonito y hace que nuestras penas desde luego sean menos, y como yo creo que es lo único que es gratis es lo que más solemos hacer sabiendo que nadie nos cobrará por ello.

En cualquier caso si no tenemos suerte de ser los afortunados deberemos continuar con nuestra rutina y ahorrando de la misma manera o por lo menos intentándolo que no es poco, yo creo que ya nos hemos acostumbrado a vivir así y la verdad que igual con mucho más hasta nos veríamos raros, igual acostumbrados ya a una vida humilde no sabríamos como gastar el dinero o temeríamos a gastarlo pronto. La verdad que muchas personas a la que en la lotería le ha tocado un pellizco han seguido con sus vidas haciendo las mismas cosas y han seguido buscando desguaces valladolid ya que saben que de esa manera el dinero se puede administrar mejor y no gastar mucho más de lo necesario, y es que cuando te acostumbras a un estilo de vida muchas veces nos resulta muy difícil poder cambiarlo.

Pero bueno en estos casos dicen que la esperanza es lo único que se pierde por eso lo mejor que podemos hacer es si estamos viendo el sorteo es ponernos delante de la tele con nuestros décimos y nuestras estampitas a ver si por una milagro la Virgen quiere que este año por fin salgamos en el telediario, y si no pues con gran pesar esperar al próximo que seguro que a la tropecientas mil nos toca no solo la lotería sino el gordo de la Navidad.